Un traspaso sobre ruedas
Traspasar un negocio en activo es algo peliagudo en lo que a trámites y fiabilidad serefiere. Por eso las instituciones han empezado a tender puentes para que las partes involucradas simplifiquen el proceso. En Euskadi, transmisores o compradores se han interesado por el programa del Gobierno vasco, que se llama Berriz-Enpresa. El caso es que dos aficionados a la bici de Getxo han sido de los primeros en la comunidad autónoma, y por ahora los únicos de la provincia en alcanzar un acuerdo.Ser amigos y conocerse desde hace tiempo les ha facilitado los trámites. De ahí que se hayan dado la mano y estampado sus firmas para el traspaso del negocio Ciclos Olabarrieta, de Romo.
En el fondo fueron dos crisis las que les han llevado a confluir en un tipo de negocio de compra-venta y arreglo de bicis, que encima tiene que ver con su afición personal. « Conozco la tienda desde que tenía 14 años», admite Mikel Atxaerandio. De eso hace ya 28, porque actualmente tiene 34. A él la crisis le dejó sin su trabajo de técnico ambiental.
Echando la vista atrás, Pablo Olabarrieta — «tengo 63‘5 años, bromea- recuerda que a él ya le tocó de lleno la recesión económica de los años 80 y fue entonces cuando de animó a abrir este negocio. En su trabajo no veía seguridad y futuro, aparte de que los pagos de la empresa no le llegaban con la periodicidad mensual requerida. Así que decidió dejar su trabajo de oficial de primera y montar algo por su cuenta.
El caso es que Atxaerandio analizaba la viabilidad de la tienda en Getxolan — la agencia local de empleo- Behagintza —, cuando se enteró de la existencia de Berriz-En presa. Ahí cogieron ambos el atajo para sellar el traspaso de este local que está cerca del campo de fútbol del Arenas y del río Gobela.
«Firmé el 28 de mayo, el 30 Pablo bajó la persiana y el 1 de junio abrí yo», recuerda Atxaerandio. Para él que ambos fuesen amigos les ayudó a coger velocidad a la hora de cerrar el trato. La Cámara de Comercio de Bilbao ejerció de mediadora y todo marchó rodado: «Fue de gran ayuda. Está muy bien Berriz-Enpresa, porque el negocio ha estado en marcha todo el rato. No ha parado», incide Atxaerandio. 33 años lleva abierto Ciclos Olabarrieta y sigue adelante a golpe de pedal. Entre ambos acordaron que el verano era la mejor etapa para que el nuevo gestor estuviese al frente, porque hay más movimiento de bicis, ya sea por compras o reparaciones. Y eso que Olabarrieta no será pensionista hasta febrero. «Mikel estaba dispuesto y por eso he decidido adelantar un poco la jubilación», reconoce Olabarrieta.
El programa lanzado por el Departamento vasco de Comercio y Turismo ha surgido «para asegurar la transmisión de las empresas y el mantenimiento del empleo», según la viceconsejera, la también getxotarra Itziar Epalza. Berriz Enpresa empezó el año pasado, durante el que hubo 49 entrevistas de las que sólo dos negocios completaron el traspaso. Este año ya van 166, el triple que en 2014.
La experiencia ha sido satisfactoria en el municipio costero. «La ventaja es que ya tienes clientela, una facturación, no te lanzas al vacío. Piensas que si ha funcionado durante muchos años por qué no va a funcionar otros tantos». Atxaerandio reconoce que el antiguo dueño y amigo suyo, le «echa una mano, habla con algún proveedor si hay problemas y también le consulto si tengo dudas».